por José A. Robledo González, MIS
Este histórico proyecto educativo fue fundado en 1946 por los profesores Leopoldo Santiago Lavandero y Rafael Cruz Eméric. Se originó en una época cuando no había televisión ni grandes autopistas. Puerto Rico sobrevivía los estragos de la Segunda Guerra Mundial y el Estado Libre Asociado comenzaba su gestión para transformar la situación económica del país. Es por eso que este teatro brindaba a la familia puertorriqueña una forma sana y enriquecedora de disfrutar de su tiempo libre.
Sancho Panza en la Ínsula Barataria de Alejandro Casona y Declaración amorosa de Anton Chejov fueron las primeras obras escenificadas por el Teatro Rodante Universitario bajo la dirección de Leopoldo Sanrtiago Lavandero. Está compuesto por estudiantes del Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, quienes en compañía de sus profesores salían de gira durante fines de semana y días feriados para mostrar su talento actoral o asistir al personal técnico. Decía el Prof. Rafael Cruz Eméric que el propósito era llevar el teatro al campo para así estimular a los estudiantes a que ingresaran al Departamento de Drama.
El Teatro Rodante también ha sido “la escuela de cientos de actores, dramaturgos, escenógrafos y otros profesionales del teatro que han sido aclamados no sólo por el público puertorriqueño sino por el de otras partes del mundo. Entre éstos los directores y profesores Victoria Espinosa y Dean Zayas; el escenógrafo Checo Cuevas, el afamado escritor Luis Rafael Sánchez; los actores Eugenio Iglesias, María Judith Franco, Rafael Enrique Saldaña, Chavito Marrero, Juan Ortiz Jiménez, Idalia Pérez Garay, José Felix Gómez, Carola García, Linnette Tores, Georgina Borri y Miriam Colón, quien posteriormente fundó el famoso Teatro Rodante en Nueva York.